A furgoneta prestada SI se le mira el diente

Sábado 6 a.m.

La semana había sido un auténtico maratón, las fotos para el nuevo catalogo, la imprenta, telas que no acababan de llegar, barnices que no acababan de secar, retoques por aquí, retoques por allá.............Y con  la preocupación añadida del hielo y la nieve anunciada para el fín de semana. Pero la ilusión por reencontrarnos con Montse y Manel de Manresa y participar en el Salón de la Mascota eran motivos suficientes  como para intentar llegar si o si. 
Costó lo suyo cargar la furgo, resultó más pequeña de lo planeado pero nos la habían prestado y bienvenida.
Cada exposición es una prueba de fuego. Exponer tu trabajo a la opinión de la gente es muy duro. Pero su aprobación compensa de todas las angustias  que acompañan al trabajo del artesano.

Sábado 7.30 a.m.

 No pudo ser. Acababa de amanecer cuando me sonaba el móvil. No tengo palabras para describir la tristeza que me produjo oir la voz rota de Jacobo. La furgo se había parado y no pintaba bien.
Pintó fatal. Y a no quejarse que, oh milagro, pudo volver con sus camitas sanas y salvas.
Nos costó encajar el golpe, estaba claro que el fallo realmente había sido nuestro. La furgo se veía muy viajada y su dueño no es precisamente sorteresadecuidomicocheatope.
Amén.